jueves, 15 de noviembre de 2007

NO CREER EN DIOS...



Esto no es nuevo... viene dando vueltas en mi cabeza hace bastante tiempo... Hace algun tiempo me pregunte: De verdad crees en Dios? Y la respuesta fue: No. Y por primera vez, juro que por primera vez no me dio miedo decirlo... Y fue tan grande el alivio... Era una mochila tan pesada... La venia trayendo de chica, era hija de un Dios represor, que castiga, que inspiraba miedo, que pedia sacrificios, que perdonaba, que se contradecia y que te consumia de a poco... y que le privaba a la vida de todo su instinto natural, de su razon de ser, del libre albedrio... Y estaba en todos lados... Y te miraba... Te controlaba... Para luego impartir justicia... La justicia divina (que nadie la vio nunca... pero imagino que funciona como la nuestra) Un Dios que promete vida eterna a cambio de sacrificio y sufrimiento? Mas que un Dios bien se parece a un comerciante... Eso suena a canje... a farsa... Para ser sincera nunca me convencio demasiado... Pero era tan grande el temor... ¿Como no iba a creer en Dios? Imposible! Y si amigos... me siento tan liberada... tan feliz... realmente tan feliz... mi vida se hizo mucho mas liviana... mas sana... mas feliz... MAS VIDA! Sin miedo a represalias... Sin creer en un Todopoderoso... sino creyendo en mi... en mi familia... en la buena gente... sin varas para medir... sin paja en el ojo ajeno, sin ojo por ojo, sin perdonar setenta veces siete, sin tirar la primer piedra... atras quedo todo eso... Gracias a D.. ejemmm... Gracias a mi! (perdon! la fuerza de la costumbre)... Quiza este equivocada... Y este con esto renunciando al paraiso prometido... Y finalice mis dias ardiendo entre las llamas del infierno... Y bueno, al fin de cuentas... Al paraiso lo hubiese preferido por el clima... pero sin duda en el Infierno voy a estar mejor acompañada!